martes, 20 de octubre de 2009

Paralelograma

Derrapando sobre un prado de tréboles te encontré.
Fresca y natural como leche de coco.

Tu comisura delato aquella sonrisa, que tuvo un efecto fascinante sobre mi. Desde ese momento mi cuerpo se traslado hacia ti y sin perder la conexión entre las miradas empezó la ronda de chistes. Experta en el arte de hacer reír, me dejaste sin respiración, desmayandome sobre el roció de aquella agradable mañana en la que entraste en mi memoria.

Soy paisajista, me dijiste y me abrazaste hasta sentir la médula espinal, el aceite de lino recorrió todo mi cuerpo y empece a bramar de alegría sin poder entenderlo. Realice 54 diagramas y 12 teoremas sin poder hallarle una explicación a esta divina interacción a la cual nunca había sido honrado.

Te Amo, te dije.

Sin vacilar retrocediste y te quedaste taciturna, lo que corono un centrifugo domingo de azar.

Acompáñame a Retiro, me dijiste, olvide a mi hija en la estación.

Que inoportuno, pensé y este pensamiento fue el benefactor de la ultima frecuencia mesurada en mi cabeza, luego me desplace en una nebulosa, no podía hilar una palabra, ni podía ejercer algún tipo de movimiento, solo sentí un misterioso deseo de tomar un tazón de café con leche acompañado de una berlinesa.

Curiosamente logre salir de mi estupor y te dije:

- Sisi.. claro. Hace mucho te espera?
- Una semana.

- Una semana? y.. cuantos añitos tiene?

- 33, como Cristo.


No me quedo mas que acompañarla para presenciar una inedita experiencia milagrosa o caer en la cuenta de estar viviendo el sueño mas vivido en todo el mundo.

2 comentarios:

  1. olvidar hijos en estaciones... muy cortazar.
    oportuno.

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  2. increible: las letritas solicitadas para publicar el comentario eran L I M A R

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